Los casos que tratan en The Good Wife son de tal actualidad que, a veces, me da por pensar lo populistas que pueden llegar a ser. Pero en el fondo, me da igual. Siguen siendo muy buenos. En el episodio siete de esta segunda temporada la protagonista podría haber sido una Lindsay Lohan o una Vanessa Hudgens o cualquiera de esas niñas Disney que, como dicen en el epi, quieren quitarse el sanbenito de encima. El episodio titulado 'Chicas malas' tiene como protagonista a Miranda Cosgrove (imdb), Sloan, una niña prodigio, que ahora se las da de cantante dura de pelar. Conduce borracha y atropella a una de sus enemigas, por lo que va a juicio. Y esto niña, le dice Alicia, no es Los Angeles. En el episodio se suceden todos los clichés que hacen de una dulce niñata una femme fatale vergonzante.
INCISO ALERTA CAMEOS: Me ha flipado ver a Laila Robins (imdb) como su protectora madre. Robins salió en In treatment interpretando a una ex de Gabriel Byrne. Y ha habido otro cameo buenísimo. El cura colega de Peter ya ha salido varias veces interpretado por Gbenga Akinnagbe (imdb, el asesino Chris en The Wire). Pues en este episodio conocemos a su padre, que no es otro que Frankie Faison (imdb, el comisario Burrell en The Wire).
He aquí el decálogo que nos ha enseñado The Good Wife.
Las chicas malas...
- Se tiñen el pelo y se visten como putas.
- La lían parda en los bares, donde haya más gente.
- Se marcan algún vídeo hot o lo que llaman un 'Lap Dance'. Bailecito a lo Bar Coyote.
- Tienen una hermana que parece tonta y es aún peor. Y una madre protectora que si se divorcia quiere chupar del frasco.
- Protagonizan parodias de sus fechorías en You Tube. Y les mola.
- Tienen archienemigas a las que putean (Sloan atropella a una).
- Van a juicios por conducir bajo los efectos del alcohol.
- Mienten: para apoyar su tesis dicen ser bulímicas.
- Son carne de cañón de las nuevas teconologías. [Paris Hilton twitea que Sloan no llevaba bragas en el juicio].
- Salen en Rolling Stone. Y en TMZ (web). Of course. Ay, la FAMA...
1 comentario:
Yo lo primero que dije al ver al padre del cura fue: ¡¡¡Ohhh shiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiit!!!
Que recuerdos...
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