Piloto The Michael J Fox Show, el Parkinson no me hace gracia

Me alegra que Michael J. Fox viva una segunda oportunidad. Sus cameos televisivos mofándose del Parkinson (especialmente el de The Good Wife) son el mejor aval para demostrar que podía enfrentarse a una serie como protagonista. Ahora bien, The Michael J Fox Show no es sólo ver al protagonista de Regreso al futuro quitándole hierro al asunto y autoparodiándose continuamente, no es sólo aplaudir lo valiente que ha sido al interpretarse (casi) a sí mismo mostrando las barreras a las que se enfrenta en el día a día o el desconocimiento de la gente sobre la enfermedad que padece. La serie muestra también a esa familia (numerosa) y a sus compañeros de trabajo (es presentador de televisión) conviviendo también con este personaje y, por tanto, con su enfermedad. Y son estos personajes secundarios los que me fallan. Betsy Brandt, la mujer de Hank en Breaking Bad, es una mujer comprensiva, pero harta de tener a su marido por el medio. Si en la serie de Vince Gilligan au personaje es de los más maltratados (no aportó gran cosa hasta el final y ni eso) aquí no me la creo para nada. Hubiera sido más interesante juntar a Michael J Fox con la que hace de su hermana, por ejemplo, hubiera sido mucho más cachondo, pero eso le haría luz de gas a su personaje. Luego están los (en general) aborrecibles hijos. Se salva el pequeño, porque va a su bola y casi que es un clon de su padre, imitándole. Pero no me es suficiente. Lo más sangrante es ver a Wendell Pierce (The Wire, Treme) como un tipo trajeado, manipulador pero en plan buenazo, con un carisma cero. En resumen: es muy loable y se agradece que un actor tan popular y querido como Michael J. Fox se ría de sí mismo y monte este Saturday Night Live (la serie no deja de ser momentazos puntuales) y nos acerque a una enfermedad que no pasa desapercibida, que es difícil de ocultar. Sin embargo, no me parece suficiente. No me siento cómoda sonriéndome ante las desgracias que le pasan (ya he tenido más que suficiente con las bromas de Ricky Gervais), por mucho que el tipo sea positivo y que ponga como ejemplo de superación aquella mujer africana que dio a luz en la copa de un árbol. No hay buenas comedias esta temporada (salvo con reparos The Goldbergs, Mom, Brooklyn 99), pero tampoco hay que agarrarse a un clavo ardiendo y éste lo es.