25.3.09

Con Paul McCartney en Londres

Con Sergi Rodríguez de Fotogramas (¡la competencia!) y Pol

Sobran los comentarios. Aquí Sir Paul McCartney, un mito, una leyenda viva, un puto genio. Párame Pol! Cumplirá en junio los 67. De todas las fotofrikadas que me he hecho en los últimos años ésta es la única que enmarcaría sin sonrojo (jeje). Lugar: Londres, fiestón Martini post-estreno de la comedia british musicalera The Boat That Rocked (en España se estrena el 28 de mayo como Radio encubierta, ya que habla de una radio montada en un barco que emitía el diábolico rocknroll en los 60). Ojo, seguidores de Mad Men, January Jones, señora de Don Draper, repite década, pero aquí, liberal, se nos casa con secreto bajo el brazo y no es un bombo (la peli es pelín misógina, son todas unas zorras de tomo y lomo).
  • Primera paradoja: ver comer a Paul a dos carrillos cosas como un bol de guisantes con arroz y espárragos trigueros (esto es lo que tienen los ricos, y más si son ingleses, que son agarrados de cojones). No daba a basto, no tenía manos. Pero a mí como que esta actitud populachera como que me gusta (nosotros nos pusimos finos, pero semos periodistas). Su nueva novia, pululaba por allí, una tía que no se ha operado la nariz, NO, y que no se ha operado las tetas, NO. Pero por lo menos era discreta, la chica. Vamos, que no hacía pose.
  • Segunda paradoja: en la peli sesentera no suenan Los Beatles, sí los Rolling, una cuestión de derechos (a ver si Jacko, que cantará por última vez en Londres en una giraza de última hora con entradas agotadas, suelta las acciones que compró en 1985!), y, sin embargo, Mike (Jagger, no Jackson) no estaba y sí Paul. Ole!
  • Tercera paradoja: tú ves a Madonna, a Obama, a Michael Jackson, a Paul... ¿y no te tiras a su cuello, a por una foto, un autógrafo? Los ingleses, no (los catalanes dudan, esta es una puyita a Sergi, de Fotogramas, que él no quería pero al final se arrimó gustoso, besos). A Paul no se le acercaba ni dios, pero las puretas lanzaban las fotos como al aire, disimulando. No entendía nada. O vas o no vas. ¿Qué pierdes porque te diga fuera de aquí asshole? Pues todo lo contrario. Con espárrago en mano, bol y copa de champán no sólo accedió a hacerse la foto en todo el tumulto sino que soltó alguna frasecilla de español (le dije que venía de España, yo siempre haciendo patria, algo que también escocerá a Sergi, ay!). En fin: lo mejor de la noche, junto a la especie de luz misteriosa que sobrevolaba nuestras cabezas, y que Xavi de Martini captó con total naturalidad. ¿O era su dedo?

5 comentarios:

Unknown dijo...

Pues yo no sé que haría en un momento así, ya que supone la consagración de tu vida al conocer a uno de tus mitos musicales.

Yo como no tengo ninguno no creo que me pusiera histérico, ni me desmayaría... Eso sí, si me cruzo con Jorge García, Terry O'Quinn, Zachary Quinto o Kristen Bell... me daría un ataque al corazón, así que no me daría tiempo a pedirles una foto y mucho menos un autografo.

Mariló García dijo...

Ojosombra, lo curioso es que no lo considero uno de mis mitos musicales (por ejemplo, para mi amigo Pedro, sí). Pero es un Beatle, es que solo por eso... Es la leche! un momento irrepetible!

Unknown dijo...

¿Había abusado de la bebida? Porque ya sabemos de que palo van estos rockeros, aunque se le ve majo en la foto.

Mariló García dijo...

Ojosombra, Bebida? que va! allí sólo había champán (lo que bebe) y combinados de Martini (vamos que no subía ni pa dios)

Charlotte Harris dijo...

Has despertado mi envidia, My Darlings!