23.12.06

Nostalgia, música y cotilleo empresarial

Anoche me bajé desde Alcobendas a Madrid. Quedé con Ana e hicimos tiempo en su casa, ya que se iba hoy a Valladolid. Le llamó su jefe en Apple, Pier, que es suizo, que estaba con un cliente argentino que ahora vive en Cork ya que su mujer es irlandesa. Quedamos para tomarnos algunas cañas y hablar de los aumentos de sueldo que no han existido en Apple este año (al menos en el área de Ana) y de viajes, como el de París en el que Ana y yo nos conocimos.

Luego me fuí a Alonso Martínez, ya que había quedado con Sue y su pandilla. Hacía diez años que no se reunían todos (una de las parejas vivía en Nueva York desde hacía varios años) y yo estuve allí para contarlo. Además, cantaba una colega suya, Susana, del grupo Celofunk, que además celebraba su cumple.

Fuimos primero al bar Bulevar, donde trabaja Fede, un amigo de Sue y en el que me encontré por sorpresa a Paco que también trabaja allí y no lo sabía. A Paco me une su amistad con una colega de mi empresa y nuestro amor por el rap.

Sue, con Fede, el encargado de Bulevar.


Foto nostálgica en Bulevar. Diez años después se vuelve a reunir toda la pandilla de Sue. El del gorro, Jose Luis Corral, ha sido, me contaba, el único recolocado en Hachette tras la escabechina por el cierre de Maxim. Ahora curra en la revista Qué me dices! A la derecha, la pareja que vino desde Nueva York. Él, superalto, se llama Peter, aunque no es su nombre real y es español. A la izquierda con gafas, Claudia, una colombiana que trabaja en showrooms y aunque se fue antes del concierto me pasó sus datos. Me habló de varios mercadillos y showrooms a los que no podía faltar. Como el de Clan-destino (desde el 26 hasta el 5 de enero en Travesía San Mateo).


Sue, rodeada. Detrás de ella, con perilla, Iván, su tatuador. Estábamos en el garito del concierto es El Junco, al lado del Bulevar en la misma plaza de Alonso Martinez. Allí se suelen hacer conciertos.


Las chicas de Celofunk en directo. Susana, de verde, y su hermana a pleno pulmón. Susana cumplía años ese mismo día, le cantamos el cumpleaños feliz y Sue subió al escenario para hacer n comentario.


Mientras todo esto sucedía, llegó Ana y una amiga suya abogada, de Ciudad Real. Al hablarle de nuestro curro y de todos los cambios que se avecinan, su amiga no daba crédito. Estuvieron allí un rato cortito, porque Ana tenía que madrugar mañana para irse a Málaga donde pasará las fiestas.

Con Ana G. y su amiga la abogada de Ciudad Real.

No hay comentarios: