4.6.23

Opinión. Deadloch, un thriller australiano hecho por mujeres bastante pasado de rosca

Opinión de la miniserie australiana Deadloch (tres episodios) en Prime Video.


Lo insólito de la serie es que las víctimas son hombres y ellas, las policías, las que investigan, las que se enteran de lo que pasa, mujeres. Y las situaciones y tramas son bastante retorcidas y negrísimas. Lo malo es que todas, absolutamente, todas las mujeres de Deadloch caen mal, son estereotipos exagerados. La única que se salva es la jefa (Kate Box), la detective a la que le cae el caso de rebote, que está como el espectador hasta el moño de todas ellas (incluida su novia, una veterinaria que vive en los mundos de Yupi). Deadloch es entretenida, pero se exagera lo cómico de forma absurda y puede llegar a exasperar (especialmente la detective que llega de fuera que es una tía bastorra, a lo Joe Pesci, sin ninguna gracia).

De qué va: En la ciudad de Deadloch, en Tasmania, durante las preparaciones del Festival de Invierno aparece un hombre muerto. Dos investigadoras muy diferentes entre sí tendrán que trabajar juntas para resolver el caso, la sargento local Dulcie Collins y la investigadora Eddie Redcliffe, recién llegada de Darwin.

Las creadoras son Kate McCartney y Kate McLennan, y el equipo de guionistas y directoras está formado por mujeres. Hasta los animales que salen son hembras (el galgo de la prota, el león marino que corretea a sus anchas). Para hacerse una idea del tono. La primera escena transcurre en la playa con dos chavalas que se encuentran a un hombre muerto desnudo. Con los nervios una de ellas le tira la colilla que va a caer a su pene flácido (para el ranking). Vemos cómo se le queman los pelillos del pubis. Al final del primer episodio la cosa se caldea porque aparece otro cuerpo. Engancha, pero lo haría más si hubieran rebajado un poco el tono.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

lo de la policía q viene de afuera no tiene sentido su comportamiento, sobreactua d una forma tan burda q da ganas de dejar d verla, el resto bien, se ve con ganas, pero me costó seguir viendola.

Anónimo dijo...

Insufrible! Me rendí en el primer capítulo.