La gran pregunta a la hora de comprar un producto, por ejemplo, en Amazon, es diferenciar si los comentarios positivos o negativos son fiables, no están hechos por los propios vendedores o por influencers a los que la marca les ha pagado.
Para hacer este reportaje para Buena Vida, de El País, hablé con varios expertos, leí varios artículos sobre el tema y la conclusión es sorprendente. Prácticamente todo el mundo que compra online lee los comentarios, los necesita por encima de eslogans o publicidad de marcas; hace caso más a los comentarios negativos y desconfía de los productos que presumen de demasiadas estrellas. El sentido común es la herramienta principal para descubrir los falsos comentarios, pero hay otros trucos más. Y, pos supuesto, Internet provee también de las herramientas necesarias para su denuncia si así lo creemos necesario. Leer más.
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