24.7.12

Crítica. Sin rastro, de Heitor Dhalia: Amanda Seyfried frenética y el cameo de Jennifer Carpenter (Dexter)


A Amanda Seyfried no la persigue el lobo de Caperucita Roja sino una obsesión: encontrar a su hermana, con toda probabilidad, retenida por el mismo maniaco que la secuestró a ella. No la acompaña un Justin Timberlake, como en In time –aquí ella es la intrépida heroína, la versión femenina y juvenil del Harrison Ford de Frenético o del Mel Gibson de Rescate–, aunque sí el mismo sentido acelerado de una contrarreloj: su camarera algo neurótica e incansable se marca 24 horas para resolver el entuerto aunque no sepamos muy bien por qué. La actriz es la absoluta protagonista (¡vaya primerísimos planos!) de un thriller que arranca con interés (¿quién es el sospechoso?), que comienza a mostrar sus puntos débiles muy pronto (la policía es tonta, ella es demasiado lista, el espectador se ve bombardeado de pistas cada vez más falsas) y que se va desinflando hacia un final que poco o nada tiene que ver con la premisa inicial. Es como si en El silencio de los corderos (con la que comparte semejanzas, hasta el escondite en el agujero) nunca viéramos al criminal, nos crearan expectativas sobre su identidad, para descubrir que efectivamente, el quién es quién es lo de menos (entre los secundarios, caras conocidas de TV, entre otras, Jennifer Carpenter, la hermana de Dexter, o la pareja de polis más ineficaz del año, Daniel Sunjata –Rescue me– y Katherine Moennig –L–). Ojalá el guionista de Sin rastro, Allison Burnett, hubiera hilado más fino (experiencia tenía: en 2008 estrenó un thriller parecido, Rastro oculto, con Diane Lane, ambientado también en Portland). Pero, eso sí, fans de la actriz, en Sin rastro (Gone), de Heitor Dhalia, Amanda Seyfried está estupenda. Se estrena en España el 3 de agosto.

[Crítica publicada en Cinemanía N203]

2 comentarios:

anto33 dijo...

Pues a mí me ha gustado,qué quieres que te diga.Lo de que la poli no la cree es lógico,por sus problemas mentales.Me encanta las trolas que cuenta,a cada uno una distinta...Es verdad que el malo flojea y no resulta chocante,pero el final no me ha parecido tan malo.

Mariló García dijo...

Como comento en la crítica (y hasta se ve en el poster) se hace demasiado hincapié en la identidad del asesino. Que ella pueda tener ciertos problemas piscológicos (lo normal) no quita que la policía pase de ella. Creo que el guión es muy forzado, ya que, quitando a la poli del medio, es la única forma de que ella se quede sola y sin ayuda sea la heroína de la peli.