12.11.11

Crítica. Melancholia, el fin del mundo según Lars von Trier


(puede contener spoilers) Melancholia es una película preciosa. Triste, meláncolica, depresiva, pero bella visualmente. Lars von Trier ha creado, al menos, al comienzo y al final de la película, una serie de imágenes oníricas, hipnóticas (a mí me recordó a otra obra apocalíptica como es El árbol de la vida de Terrence Malick) de esas que te resuelven el póster de la película pero también te crean intriga y desasosiego. Punto y aparte merece la música, la fotografía y la ambientación (ese hotelazo ideal con campo de golf y caballerizas). Luego, Melancholia (así se llama el planeta que podría estrellarse contra la Tierra) se divide en dos partes. Comienza con un caos familiar –durante la boda de los personajes de Kirsten Dunst y Alexander Skarsgard, mucho más guapo que en True Blood– y acaba con un caos universal (cuando cobran sentido aquellas primeras imágenes del inicio). Dunst y Charlotte Gainsbourg (casada con Kiefer Sutherland, un metódico y cínico científico) son dos hermanas antagónicas. La rubia y la morena, la pasional y la racional, la que no piensa en las consecuencias y la que vive temerosa de ellas. En apariencia, Dunst es como su padre (un jovial Jon Hurt), pero ante la adversidad se comporta como su resentida y caprichosa madre (Charlotte Rampling). Gainsbourg, en apariencia, parece una mujer resuelta y decidida, pero pronto descubrimos que es gracias a su marido, ese científico seguro de sus predicciones, cuando encuentra orden a su particular caos. Mientras una (Dunst) tiene miedo a la vida; la otra (Gainsbourg) lo que teme es a la muerte. Mientras una (Dunst) presiente que no hay vida más allá de la que conocemos y sonríe; la otra (Gainsbourg) se atenaza y acaba apoyándose en la que parecía más débil. Puedes filosofar sobre lo que ves, pero Von Trier no pretende, como Malick, hacer una reflexión profunda de la existencia del ser humano. Simplemente, encaja un momento de la vida de una familia algo inestable en el caos universal. Me parece más accesible y menos arriesgada que El árbol de la vida, lo que será una virtud para unos y un fallo para otros.

Atención a la copia.
http://yonomeaburro.blogspot.com.es/2014/04/poster-revenge-y-melancholia-alerta-copia-ophelia.html

3 comentarios:

Petite Cecile dijo...

Comparada con la última que había visto de Lars Von Trier, Anticristo, esta me resultó un cuento con final triste. Visualmente espléndida, por suerte Kiefer Sutherland puede hacer otra cosa que no sea de Jack Bauer y Skarsgard me parece el personaje más aburrido y soso de la peli. Las mujeres tienen el control y las 3 lo hacen muy bien. Pensé que iba a ser más bajón pero no, me gustó y no me dormí a las 20 minutos como con El Árbol de la Vida.

Beso!

Mariló García dijo...

La de Anticristo me negué a verla, me daba bastante palo después de leer alguna cosa. Los tíos no pintan la mona: sólo hay que ver cómo los utiliza una y otra. Y como ellos huyen a la primera de cambio. A mí el arbol de la vida me pareció hipnótica. No entendía nada, pero no podía dejar de verla...

Anónimo dijo...

Sinceramente, creo que isualente la película es una obra de arte, con esas imágenes casi como si viéramos un sueño, me ha sorprendido muy gratamente, ya que despues de ver Dogville, me negé en banda a ver nada más de Lars von Tier, muchas gracias a todos los que me aconsejasteis verla, es espectacular