Si no hubiera elegido la profesión que tengo habría hecho diseño de botes y cajas de perfumes, por ejemplo. Porque puedes un poco jugar. Kenzo lanza estas dos cremas, en verde agua y con formas redondas. Pero también se atreve con su
perfume Tokyo, en negro más agresivo. El diseño aunque sea industrial tendría que ser considerado un arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario