18.9.08

Tina Fey como Sarah Palin y el timo de Telefónica con la identificacion de llamadas


Me alegra el día ver a Tina Fey (acabo de terminarme la segunda de Rockefeller Plaza, creada por ella y es una puta genia) emulando a Sarah Palin, a la que se parece un montón. En lo físico, claro, porque a nivel ideológico porqué siempre será que los republicanos tienen las armas de destrucción masiva en sus propios hogares (jodó!).

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"Yo puedo ver Rusia desde mi casa"

- Hillary Clinton: "Creo que la diplomacia debería ser el núcleo de la política exterior". Sarah Palin: "Y yo puedo ver Rusia desde mi casa". H. C.: "Yo defiendo que el cambio climático está causado por el hombre".S. P.: "Y yo que es simplemente Dios abrazándonos más fuerte". H. C.: "No estoy acuerdo con la doctrina de Bush". S. P.: "Y yo no sé qué es eso".

- S. P.: "Creo que todas las mujeres estarán de acuerdo en que, al margen de nuestra orientación política, ya es hora de que una mujer llegue a la Casa Blanca". H. C.: "No. ¡Es mi hora! ¡Se supone que es mi hora! Quiero añadir algo. Yo no quería que una mujer fuera presidente. Yo quería ser presidente, y da la casualidad de que soy mujer. No quiero que compares tu camino a la Casa Blanca con el mío. Yo he arañado, me he arrastrado por el barro y por alambradas, y tú simplemente te deslizaste en tu trineo con tu banda de reina de belleza y tus gafas a lo Tina Fey".

- S. P.: "Así que invito a los medios de comunicación a que no caigan en un comportamiento sexista durante las próximas seis semanas". H. C.:"Aunque no es nada sexista cuestionar las credenciales de una política. Por favor, pregúntenle a ésta por los dinosaurios. Así que invito a los medios a que le echen un par. Y si no los tienen, les presto los míos". Via ElPais.

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El lado oscuro de este jueves ha llegado vía Telefónica, que además de meterme unos clavos semanales por una velocidad de ADSL que no tengo (ni creo que exista en el universo), me ha cobrado (pero ya) el dichoso servicio de identificación de llamada, que yo no pedí. Resulta que empieza a cobrarse a partir del 1 de septiembre (yo juraría que era octubre). Así que, a pesar de que sean unos centimillos de nada, me he molestado en llamar al 1004 (en la web de Telefónica es imposible encontrar el espacio de reclamaciones), hablar con una máquina y finalmente darme de baja a través de un tipo que me lo ha solucionado rápido.

El problema ha llegado cuando he pedido que me devuelvan el dinero (que son céntimos, repito, pero que no me da la gana pagar) y me ha dicho que imposible, que la única vía para reclamarlos es a través de la OCU. ¡Cómor! ¡Telefónica se pasa por el forro algo para lo que tenía que estar preparada desde hace mucho tiempo! El tipo éste no tenía la culpa y ha sido más educado que otros tipos/as que con voz con acento sudaca me han atendido otras veces. Para qué engañarnos, suelen ser personas no cualificadas para atender llamadas, que actúan como robots. Me he sentido, tras perder mis centimillos, como Richard Pryor en Superman 3 cuando se hacía millonario gracias a acumular el céntimo por empleado que no cuantificaba la empresa donde trabajaba. Pero ¡ojo! Prior es Telefónica y yo, la empresa estafada.

1 comentario:

Anónimo dijo...

esta tia es un genio