El mercado de Donghuamen, en Beijing, es famoso por vender comida que nunca comerías, como escorpiones (aquí puedes ver más fotos que hice) y caballitos de mar (arriba), servidos en brocheta (también los venden en tiendas desecados para hacer caldos). Los chinos tapean con gusto este tipo de, para ellos, delicatessen. Yo pasé. Si comer en un puesto callejero ya es chungo, se duplica el peligro probando cosas como éstas que podeis ver a continuación.
Nosotros fuimos de noche. En realidad en las guías aparece como mercado nocturno y cuando estuvimos en julio no lo vimos abierto de día. Sin embargo, en Tele5 hicieron un reportaje del mercado de día. No sé si la afluencia de turistas por los JJ OO ha hecho que abran todo el día (o quizás fuera por la tarde...).
De lo más asquerosito: ollas gigantes llenas de criadillas, corazones, etc., cociendo en su jugo... Los chinos lo llaman Hot Pot. En los restaurantes te lo ponen en ollas individuales y tú eliges lo que meter dentro. Hay restaurantes sólo donde venden el Hot Pot.
El Hot Pot versión albóndigas.
Estrellas de mar y al fondo brochetas de cienpiés.
Brochetas de capullos de abeja, con propiedades buenas para el estómago, según dice el cartel.
Los chinos se lo comen allí mismo... Me recordó a las fiestas de la Paloma en Madrid donde puedes comer callos y entresijos y todo eso que huele fatal. En algunos puestos chinos huele francamente mal, una mezcla entre cloaca y un olor fuerte que es insoportable.
Cangrejazos.
Empanadillas chinas. Si son al vapor se llaman Baozi y si llevan semillas de sésamo por fuera y son más crujientes, Shengjianbao. Hay muchas variedades de empanadillas, las comen como tapas y también en su versión dulce para merendar. Si tienen forma de luna son Jiaozi (si éstos están fritos, Guotie). Y si tiene la forma de empanadilla: Xialongbao.
Algo más normalito: maiz. Lo comen bastante.
Esto tiene tan buena pinta... agggg.
Y esto otro, ni idea. Pedazo de montaña sobre pan, y las bolas fritas.
Brochetas de todo tipo: pulpo, cangrejo, orugas...
Aquí podeis ver mejor en primer plano a la derecha las pedazo orugas crujientes...
En cada puesto (habría más de 50) había al menos un par de empleados vestidos con un uniforme con su identificación. Al pasar te gritaban en chino y te daban a probar. Ni gratis, claro.
Las típicas empanadillas fritas.
No suelen comer pan. Cuando lo hacen es así, tipño kebab.
Hot Pot de tripas.
Fideos fritos con verduras.
El colorido es tan atractivo como pocas las ganas de probarlo.
Al estilo gofre nuestro estas bolas dulces suelen venderlas en los puestos.
De aquí a abajo, todo tipo de pelotas dulces de diferentes colores (lo de arriba a la derecha parecen churros, ¿que no?).
1 comentario:
hay cosas atractivas, hay que probarlo todo!
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