Mad Men, la exposición en Nueva York

Cita ineludible en mi reciente viaje a Nueva York: la exposición de Mad Men en Queens, en el Museum of the Moving Image. Aunque pequeñita, la muestra reúne un montón de objetos, recortes, productos publicitarios, maniquíes, vestidos, televisores con imágenes de la serie, etc., incluyendo también la cocina de Betty y el despacho de Don Draper (en la imagen, aunque se supone que no se pueden hacer fotos yo no me pude resistir a llevarme ésta de recuerdo).

En la expo de Mad Men.

Entramos en la muestra de Mad Men en el Museum of the Moving Image de Nueva York, desde maniquíes a escenarios a escala real. La muestra explora el proceso creativo de la serie firmada por Matthew Weiner para la cadena AMC. Ahora que ha acabado en su séptima temporada, adquieren mayor relevancia algunos de sus sets de rodaje, como por ejemplo, la cocina de Betty o el despacho de Don Draper a escala real.A pesar de permanecer aislados por una valla transparente, en los dos escenarios te sientes parte de ese mundo imaginado en los años 60.Es la primera vez que se pueden admirar objetos relacionados con la producción. Pudimos disfrutar de más de una treintena de vestidos icónicos, algunos de ellos mostrados a su vez en movimiento en la secuencia de la serie en el que aparece.Ilustraciones y storyboards, notas personales del creador, fotografías de la época que han inspirado la atmósfera de Mad Men, productos que han influido en el diseño de producción, anuncios publicitarios y algunas imágenes inéditas, como los diferentes títulos de crédito que no se usaron finalmente.Maniquíes con los modelazos de Betty (January Jones) o Joan (Christina Hendricks) y los looks de aspirante a publicista de Peggy Olson (Elisabeth Moss). Por no hablar del llamativo vestidito negro con volantes de Megan (Jessica Paré) al bailar y cantar el Zou Bisou Bisou que, además, suena por los altavoces.La evolución de las tarjetas de presentación de los personajes me llamó mucho la atención. Los decorados, las muchísimas fotos, libros de cocina con recetas de los 60, vajillas y accesorios de todo tipo, una máquina de cigarrillos, los diferentes pósters que no se usaron y multitud de escenas recreadas para la ocasión.En la tienda, además, un regalazo: tazas de Mad Men e imanes como recuerdo, pues tengamos en cuenta que la serie no ha vendido merchandising oficial de ningún tipo.