Critica Kung Fu Panda: los accidentes no existen (ni creer que todo es posible)

Había leído tan buenas críticas del último invento de Dreamworks que me esperaba mucho más (me sigo quedando con Shrek e incluso Bee Movie me pareció mucho más original). En cuanto a animación es impecable, pero le falla la historia, previsible y muy infantil (aunque hará las delicias de los más enanos). No puedo hablar del doblaje (Jack Black y/o Florentino Fernández) porque la he visto en latino (siempre me hace más gracia, ya que sonorizan hasta los carraspeos). Po es un panda que trabaja cocinando fideos, aunque su sueño es ser un samurai, como sus ídolos, cinco animales con diferentes habilidades. Por supuesto, hay un animal tela de malo (la cárcel custodiada por rinos es genial) que clama venganza. La moraleja es evidente: si persigues tu sueño ("los accidentes no existen") podrás alcanzarlo y hacer lo que te propongas. Sin embargo, no queda claro qué le mueve realmente a este apacible animal a ser violento, a ser uno de los Cinco Furiosos. Es un héroe sin pretenderlo y se enfrenta a sus enemigos usando su propia torpeza. Otra de las grandes ideas es que en la vida (como en los fídeos) no hay ningún secreto para hacerla especial. En tu mano está creerlo. Lo peor de esta película es cómo rematan la trama, de un plumazo, ya que es evidente que por mucho que un panda, gordinflón y torpe, aprenda las técnicas del kung fu no puede contar con las mismas habilidades y agilidad que pongamos un tigre (no todo es posible por mucho que quieran enseñar esto a los niños, el rollo este de 'querer es poder'). Al panda le anima el recibir comida como recompensa por sus avances, aunque no se da cuenta hasta que no se lo comenta el profesor Shifu, su instructor, el personaje más logrado (los Cinco Furiosos no molan nada). Es decir, el panda parece que no deja de ser animal, al fin y al cabo, como si le estuvieran domesticando. Lo mejor es la madurez de algunos detalles, como que Po sea adoptado pero él parezca no saberlo (¿o sí?) y que una tortuga lentorra sea el amo del cotarro, desaparezca sin más (¿se muere?) y provoque todo el lío con el oso desde la más absoluta pachorra (¿o es genialidad?).
Kung Fu Panda se estrena en España este viernes.